La degradación del suelo afecta al 20 por ciento de la superficie agrícola mundial
La mala gestión de la tierra está provocando que la erosión del suelo afecte ya al 20% de la superficie agrícola mundial, a un 10% de los pastizales y un 30% de los bosques. Además, 1.500 millones de personas, la cuarta parte de la población del planeta, dependen para sobrevivir de suelos sujetos a la erosión, un fenómeno cuyas consecuencias incluyen el hambre, la disminución de la productividad agrícola, la emigración, los daños a recursos y ecosistemas básicos y la pérdida de biodiversidad debida a cambios en los hábitats. Así se afirma en el informe «Evaluación de la Degradación del Suelo en Zonas Áridas», elaborado por la Organización para la Alimentación y la Agricultura de la ONU (FAO), el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y otros organismos a partir de datos de los últimos 20 años. Según ha afirmado Parviz Koohafkan, de la División de Tierras y Aguas de la FAO, la erosión del suelo también tiene importantes implicaciones para la mitigación y la adaptación al cambio climático, ya que la pérdida de biomasa y materia orgánica del suelo desprende carbono a la atmósferay afecta a la calidad del suelo y a su capacidad de mantener el agua y los nutrientes. Cerca del 22% de las tierras sujetas a degradación están en zonas muy áridas o secas, mientras que el 78% está en regiones húmedas, de acuerdo con el estudio. En comparación con evaluaciones previas, los expertos han descubierto que la erosión del suelo ha afectado a nuevas zonas desde 1991, mientras que algunas áreas muy degradadas históricamente están ahora estables tras haber sido abandonadas o explotadas con un bajo nivel de productividad. A pesar de los resultados, la FAO señala que no todas «las noticias son malas». Los expertos han comprobado que existe una serie de lugares en donde el suelo se usa de forma sostenible (el 19% de las tierras agrícolas) o donde se alcanza una mayor calidad y productividad (el 10% de los bosques y el 19% de los pastizales). Muchos de los avances en tierras agrícolas están asociados con el riego, aunque también hay ejemplos de mejoras en tierras agrícolas de secano y los pastizales en las praderas de las Grandes Llanuras en Norteamérica y en India occidental. Algunas de las ganancias corresponden al incremento de la cubierta forestal, ya sea a través de plantación de bosques, en especial en Europa y Norteamérica, y algunos proyectos de bonificación de tierras, como sucede en el norte de China.