El bolsillo y el medio ambiente agradecen la calma al volante
La conducción eficiente ahorra hasta un 25 por ciento de combustible y reduce un 15 por ciento las emisiones contaminantes según indica la Dirección General de Tráfico
La calma y la sensatez al volante tienen múltiples recompensas. Al plus de seguridad que supone respetar los límites de velocidad, con lo que se reduce drásticamente el riesgo de accidentes, se suma el nada desdeñable aliciente del ahorro de combustible, y por tanto de dinero, la disminución de las emisiones contaminantes, del estrés y la tensión del conductor y el menor desgaste del vehículo. Una idea en la que se incide ahora desde la Dirección General de Tráfico, empeñada en concienciarnos de las ventajas de una conducción eficiente. Lo hace la DGT en la época del año en que se concentra el mayor número de desplazamientos de automóviles por carretera y con una batería de consejos para la eficiencia en la conducción que ayudarán a mejorar el rendimiento, consumo y vida útil de nuestros vehículos. Se trata de aplicar unas técnicas de conducción eficiente que dicta el sentido común y que permiten además de reducir el riesgo de accidente, rebajar entre un 10 y un 25 por ciento la factura de combustible y disminuir sensiblemente, hasta un 15%, la emisión de gases contaminantes, en especial de CO 2 , a la atmósfera. Están recogidas en el Manual de Conducción Eficiente editado por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (Idae) (www.madrimasd.org/cienciaysociedad/Kioto/documentacion/pdfs/manual conduccion.pdf ) que analiza por extenso los efectos de estas beneficiosas medidas. Nos recuerda como los automóviles «utilizan un 15% de la energía total consumida en nuestro país, la cual proviene en el 98% de derivados del petróleo» y como «el 40% de las emisiones totales de CO2 tiene su origen en el transporte por carretera». Arrancar sin pisar a fondo Para lograr este notable ahorro, contaminar menos, viajar más seguro y conservar mejor nuestro coche, sólo hay que seguir una serie consejos tan sencillos como arrancar sin pisar el acelerador y evitar la brusquedad en salidas y detenciones o no rebasar los límites de velocidad. Algunos de estos consejos pronto serán norma, dado que el Ministerio de Industria que comanda Miguel Sebastián ha solicitado, entre otras medidas de ahorro energético, que se limite a 80 kilómetros/hora la velocidad en los accesos y salidas de las grandes ciudades. Una medida que se viene aplicando desde hace más de un año en todo el anillo de Barcelona con resultados más que satisfactorios tanto a juicio de Tráfico como de las autoridades autonómicas y municipales.