Las aguas del mar Cantábrico tienen una alarmante escasez de peces

La organización ecologista Oceana ha advertido de la desaparición de peces por la pesca ilegal en el Cantábrico, al tiempo que alertó de la existencia de manchas de hidrocarburos en el litoral. Así se recoge en el estudio realizado tras la campaña a bordo del catamarán Oceana Ranger para analizar y caracterizar los fondos marinosde Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco. Según Javier Pastor, director ejecutivo de Oceana Europa, las principales causas de la escasez de peces son la sobrepesca y la utilización de artes destructivas, es decir, el incumplimiento de la ley. En este sentido, reclamó un acuerdo internacional similar al de Kioto, porque, «la crisis pesquera tiene una importancia mundial, es el segundo problema ambiental después del cambio climático». En una primera valoración de resultados, los expertos de Oceana descubrieronque las aguas cantábricas muestran una escasez de peces alarmante, y especies comerciales como rape, merluza, lenguado y cigala, entre otras muchas, están en grave peligro de colapso. También son preocupantes las continuas manchas de hidrocarburos que se observan en el Golfo de Vizcaya a causa de los vertidos ilegales de aguas de sentinas por parte de la flota mercante que navega por la zona. En cuanto a aspectos positivos, el estado de los fondos muestra algunas zonas bien conservadas y de gran interés para la recuperación de los ecosistemas en el futuro, entre las que destacan los bajos de Bermeo y Niebla (Galicia), el cañón de Avilés (Asturias), los bajos de la Maruca o Castro Verde (Cantabria) o los alrededores de cabo Machichaco (País Vasco). El estudio se ha enmarcado dentro del acuerdo de colaboración que Oceana desarrolla durante tres años con la Fundación Biodiversidad para documentar y proponer espacios marinos de especial interés o vulnerabilidad con el objetivo de que sean protegidos. Ana Leiva, directora de la Fundación, ha destacado la importancia de aumentar el número de espacios marinos protegidos y del impacto positivo que esta medida puede tener en la preservación de los recursos y la biodiversidad marina. Áreas marinas Durante la campaña se recorrieron más de 3.000 millas marinas y realizaron inmersiones en una treintena de lugares. Con la ayuda de un robot submarino y buceadores se observaron fondos hasta 350 metros de profundidad, donde se encontraron bosques de corales amarillos, campos de esponjas, comunidades de estrellas plumosas o crinoideos, estaciones de limpieza para peces luna, corales blancos de aguas frías, tiburones o quimeras de aguas profundas. El material recopilado, que consta de cerca de 200 horas de filmación submarina y más de 5.000 fotografías, está siendo analizado para elaborar un informe que Oceana presentará al público junto con Fundación Biodiversidad en 2009. El informe servirá de base para crear nuevas áreas marinas protegidas en estos mares europeos ya que en el año 2010 España debe entregar a la UE una lista para incluirlas en una red de zonas de conservación. Según el convenio de Biodiversidad de Naciones Unidas, para el año 2012, al menos el 10% de la superficie marina del planeta debe estar bajo alguna figura de protección. El área protegida de la superficie marina española es solo del 0,3%. Según los expertos, la falta de protección de determinados fondos marinos en el marco europeo es una de las carencias más graves de la actual Directiva Hábitats, una herramienta fundamental para que la UE pueda cumplir el objetivo de detener la pérdida de biodiversidad para el año 2010.