CORNADA DE LOBO
Matronas
«LA VIRGEN de los Peligros está encimica del puente», canta una jota de no sé dónde. ¿Será el puente de mando que hay en la Bolsa o el que patronea esta gabarra que zozobra?... ¿Zozobra?... «Más vale que zuz zobre que no que zuz falte», dise mi gitano cañí que nasió en Güerva, debajo de Badajó. Me gusta esa advocación: Virgen de los Peligros. ¿Quién le pone nombres a las vírgenes? ¿Y cuántas habrá?... La Virgen de los Ojos Grandes es la patrona de Lugo; la de la Cinta, de Huelva; del Tremedal, Teruel; de los Volcanes, Lanzarote; del Niño Perdido, Caudiel; de la Calle, en Palencia; y de las Injurias, los Carrizales, del Yugo... o la Virgen de los Esparabanes, reina de León cuando la del Camino descansa. La Virgen de la Quinta Angustia que patronea Cacabelos es mirada con cierta envidia o alivio, si cabe, por la Virgen de las Angustias que pecha con todas las agonías y no sólo con una. La Virgen de las Batallas es capitana general de los ejércitos y está bordada y presente en la sala de banderas... Y si, como se dice, «siempre se aparecen las vírgenes a los pastores», ¿por qué nunca lo hizo la Divina Pastora, que es la que entiende en el oficio?... Solamente en esta provincia, que es pastorona lo suyo, ¿cuántos nombres de vírgenes se cuentan?... Pueblos hay mil cuatrocientos y una tercera parte tiene Virgen con nombre propio y ermita, con sus leyendas, milagros, sus exvotos y romerías, pendones y novenas. Cada cual es devoto de la suya; y de la del vecino, si no enemigo, que cabe, despreción o faltoso, porque aquí se arriman las vírgenes a trinchera propia, a la causa personal o al municipio; y se las hace capitanas del equipo local que al final de ligas y torneos acuden a ofrecerle camisetas y tedeums (la Moreneta tiene que aguantar cada año a la bulliciosa y pecadora plantilla del Barsa; tiene mérito la cosa). A usted, pastorcillo, y a mí, pastorón, no se nos aparecen vírgenes, pero sí lo hará alguna filóloga combativa de los agravios lingüísticos demostrándonos el grave error de llamar «patronas» a vírgenes o santas y no «matronas», que sería lo indicado y exigible (patrón viene de páter, padre, y patrona es contrasentido, palabra algo machorra). Ni que decir tiene que la matrona de algunas filólogas tendrá que ser, sin ninguna duda, la Virgen de los Peligros... encimica del diccionario.