Un error en el método para convertir el sudor y la orina en agua potable ha sido el motivo
El sistema de purificación de fluidos retrasa la última misión del Endeavour
Los astronautas prolongarán un día más su estancia en la Estación Espacial Internacional
efe | washington
Los astronautas de la misión del transbordador Endeavour han tenido que prolongar en un día su estancia en la Estación Espacial Internacional (EEI), a unos 385 kilómetros de la Tierra, para reparar el sistema de purificación de fluidos, informó ayer la agencia espacial estadounidense Nasa.
Debido a ello, los astronautas del Endeavour abandonarán la EEI el próximo viernes y regresarán a la Tierra dos días después, una noticia que ha satisfecho a sus compañeros del Control de Misión en el Centro Espacial Johnson, de Houston (Texas, EE.UU.).
La causa de la demora proviene de la puesta en marcha del denominado Conjunto Procesador de Orina que fue transportado hasta allí por el Endeavour e instalado en el módulo «Destiny».
Este sistema forma parte de lo que la Nasaha calificado como «Sistema de Recuperación de Agua», mediante el cual se procesarán tanto la orina y el sudor de los astronautas como el agua con que se lavan para convertir todo ello en agua potable.
Pero este procesador, desde el inicio de la misión, está generando quebraderos de cabeza a los técnicos de la Nasa del Control de Misión de Houston, ya que quieren incorporarlo a la EEI para que sea utilizado por los seis nuevos ocupantes que llegarán allí, en un principio, a partir del próximo mes de mayo.
El origen
Aparentemente, el principal desperfecto de este mecanismo de líquidos se debe a la interferencia de un sensor con el aparato de centrifugación que se usa para separar el agua de la orina.
Por otro lado, los astronautas también han tenido que trabajar a fondo en la reparación de los paneles solares, en concreto, en su engranaje. Las labores extravehiculares de ayer fueron las últimas en una serie durante la cual se ha llevado a cabo un trabajo de limpieza y lubricación, sin precedentes, en el engranaje de tres metros de diámetro sobre el cual rotan los paneles solares de estribor de la nave.