Los hábitos alimenticios pueden incrementar el riesgo de padecer un infarto
La revista
de la Asociación Americana del Corazón, revela en un estudio que comer sano es esencial para mantener el corazón sano y que el aumento del consumo de frutas y verduras reduce los riesgos cardiovasculares. En sus conclusiones, los científicos señalan que se debería promover la dieta prudente para todos los países y que nunca es tarde para cambiar los hábitos, ya que parece ser que a partir de los 65 años se olvida que hay que seguir cuidándose. La alimentación debe ser equilibrada y variada, con gran número de frutas y verduras a lo largo del día.