Impiden a una niña de trece años dar la vuelta al mundo sola en velero
La justicia holandesa ha retirado la custodia temporalmente a sus padres; la menor será sometida a una evaluación psicológica antes del veredicto definitivo
Un juzgado de menores de la ciudad holandesa de Utrecht puso entre paréntesis ayer el proyecto de Laura Dekker, una niña de 13 años que quería empezar en septiembre una vuelta al mundo sola en velero. El tribunal, que puso a Laura bajo «asistencia educativa temporal» por un periodo de dos meses, estimó que su «desarrollo psicológico y su salud pueden correr peligro si parte tan pronto».
Los jueces ordenaron una investigación sobre las «capacidades» de la adolescente para enfrentarse a los riesgos que implica un periplo de dos años y evaluarán de nuevo su caso el 26 de octubre en una audiencia a puerta cerrada.
«Los padres tendrán que negociar todas las decisiones importantes sobre Laura con los servicios de protección del menor. Esto significa que Laura no puede empezar su viaje alrededor del mundo sin acuerdo», explica un comunicado del tribunal. Los jueces esperan que la investigación aporte «una mayor comprensión de cómo se preparó el viaje y qué medidas de seguridad se tomaron».
«Vamos a mostrar que todo está bien organizado y que es una iniciativa razonable», reaccionó ante la prensa el abogado de Laura, Peter de Lange, quien calificó el veredicto de «muy buena decisión».
Los jueces también nombraron un psicólogo para que evalúe las capacidades psíquicas de la joven y su aptitud para «asumir ella sola su educación» durante la aventura.
La adolescente, que organizó sola el viaje y venció las resistencias iniciales de su padre, planeaba seguir estudiando por Internet y permanecer en contacto con su familia por teléfono vía satélite. «Laura sabe exactamente lo que quiere. Nació en una barca. Lleva sal en su sangre», explica el abogado de la adolescente.
Laura nació en un puerto de Nueva Zelanda durante una vuelta al mundo en velero de siete años que hacían sus padres y en la actualidad vive en un barco con su padre en el centro de Holanda, según la prensa holandesa.
Tenía planeado zarpar en septiembre en una embarcación de 8,3 metros llamada Guppy , gracias a la financiación de varios patrocinadores. La prensa holandesa publicó que Laura tuvo su primera embarcación con seis años y que a los once navegó en solitario durante siete semanas.