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RELIGIÓN | MEDIO AMBIENTE

El Papa habla de ecología a promotores del pabellón del Vatiano en Expo 2008

El agua «tiene un valor primordial en la vida del hombre», según el Papa

Benedicto XVI.

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EFE

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El papa Benedicto XVI dijo hoy que cuando «se respeta la ecología humana en la sociedad, también la ecología ambiental se beneficia», durante una audiencia a grupo de promotores de Pabellón de la Santa Sede en la Expo Internacional de Zaragoza (España) de 2008.



El papa recibió a los españoles en el palacio Apostólico de Castel Gandolfo y les expresó su por su colaboración con el Arzobispado de Zaragoza y la Nunciatura Apostólica en Madrid, en la realización del Pabellón de la Santa Sede para la Exposición Internacional de Zaragoza del año pasado.

«Esta instalación - dijo- que fue una de las más visitadas y apreciadas, albergó una importante muestra del valioso patrimonio artístico, cultural y religioso, que custodia la Iglesia».

Con esta iniciativa, -prosiguió el Papa- se trató de ofrecer a sus numerosos visitantes «una oportuna reflexión sobre la importancia y el valor primordial que tiene el agua para la vida del hombre».

Mediante su participación en la Exposición, «la Santa Sede quiso además poner de manifiesto no sólo la imperiosa necesidad de proteger siempre el ambiente y la naturaleza, sino también descubrir su dimensión espiritual y religiosa más profunda», añadió el Papa.

Hoy como nunca «se ha de ayudar a las personas a que sepan ver en la creación algo más que una simple fuente de riqueza o de explotación en manos del hombre», subrayó.

Cuando Dios, con la creación, ha dado al hombre las llaves de la tierra, «espera de él que sepa usar de este gran don haciéndolo fructificar de modo responsable y respetuoso», dijo el papa Ratzinger.

Para el Pontífice, «el ser humano descubre el valor intrínseco de la naturaleza si aprende a verla como lo que es en realidad, expresión de un proyecto de amor y de verdad que nos habla del Creador y de su amor a la humanidad, y que encontrará su plenitud en Cristo, al final de los tiempos».

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