Cerrar

Estébanez: «Os voy a matar todos»

Siete amigos de Palomino, que iban con él en el momento de la agresión, señalaron que el ex militar, que guardaba una navaja, le acuchilló y le pilló desprevenido

Publicado por
efe | madrid

Creado:

Actualizado:

Varios amigos del joven antifascista Carlos Palomino, que iban con él en el metro cuando fue apuñalado, aseguraron ayer que su agresor, Josué Estébanez, gritó a continuación que «los iba a matar a todos» y que les llamó «guarros» y levantó la mano haciendo el saludo fascista. Los jóvenes declararon ayer como testigos en la Audiencia Provincial de Madrid en la segunda sesión del juicio a Estébanez, para quien el fiscal pide 29 años de prisión por el asesinato de Palomino. Los siete testigos han corroborado la versión del fiscal, que en su escrito de conclusiones provisionales sostiene que cuando éste se percató de que en el andén esperaba un grupo de jóvenes antifascistas, «sacó una navaja» y la ocultó en la cara posterior del antebrazo.

La Fiscalía agrega que Palomino hizo unos comentarios al acusado «cuyo contenido se desconoce» y a los que Estébanez respondió «de manera inesperada y con la finalidad de acabar con su vida, clavándole directamente en el corazón la navaja», lo que provocó la muerte casi inmediata del joven.

Estos siete conocidos de la víctima explicaron que el acusado llevaba puesta una sudadera con un símbolo de ideología de extrema derecha y que Palomino le preguntó por ella al subir al vagón. Una compañera del fallecido relató que intentó prevenirle de que Estébanez escondía un arma, pero que aun así a Palomino no le dio tiempo a defenderse porque, según resaltaron todos los testigos, «le pilló completamente desprevenido».

Por otra parte, dos vigilantes del metro aseguraron que el presunto asesino del menor antifascista Carlos Palomino no pidió auxilio, pese a que éste afirmó el pasado lunes, durante el juicio que se sigue contra él, que apuñaló al joven porque le «entró miedo» y se vio «acorralado». «Si hubiera tenido miedo, habría pedido auxilio», señaló el abogado que representa a la familia del fallecido.

Un tercer vigilante señaló que cuando fue a socorrer a Palomino uno de los jóvenes le dio un codazo en la mandíbula, y que le pareció ver el reflejo de una hoja de arma blanca, aunque señaló que no cree que trataran de herirle, porque 30 segundos después se apartaron permitiéndole asistir a la víctima.