«Las farmacias ayudarán a los peregrinos en el Año Santo Jacobeo»

El Colegio de Farmacéuticos afronta nuevos retos de cara a la puesta en funcionamiento de la receta electrónica y la ayuda a los peregrinos coincidiendo con el Año Santo Jacobeo. La vicepresidenta del colegio, Maria Luisa Delás, explica los objetivos del colectivo

-”Recientemente se ha celebrado un Congreso de Farmacéuticos en Burgos ¿qué preocupa al colectivo actualmente?

-”Es un congreso que se celebra cada dos años. El lema de este año ha sido «Nuestro compromiso, el paciente» y se analizan asuntos para mejorar la prestación farmacéutica. Se trataron temas como las guardias, la objección de conciencia con la píldora postcoital, el Camino de Santiago y la receta electrónica.

-”¿De qué manera van a intervenir los farmacéuticos en el Año Santo Jacobeo del próximo año?

-”León es la provincia que más farmacias tiene en el Camino de Santiago, con una media de una farmacia cada quince kilómetros en el Camino. Tenemos una buena oportunidad para demostrar a otros países del mundo, a través del peregrino, la calidad de la asistencia en España y en León, que es moderna y de gran calidad.

-”¿Cuál va a ser vuestra participación en la práctica?

-”Hay un proyecto que está todavía en redacción para que los farmacéuticos entreguen folletos sobre primeros auxilios. Se va a habilitar un número de teléfono al que podrán recurrir los peregrinos con un mensaje para conocer cuál es la farmacia o el centro de salud más cercano. Habrá farmacias que se impliquen más directamente en los albergues, ayudando para las curas, por ejemplo.

-”¿Cuándo se implantará la receta electrónica?

-”Hay un proyecto piloto para que empiece a funcionar en una farmacia de un pueblo de Valladolid a finales de año. El resto de las comunidades ya tienen la receta electrónica. Nosotros vamos poco a poco, pero llegará. Lo más importante es que llegue a todos los farmacéuticos y todos los pacientes. Para eso hace falta una interrelación sanitaria. Casi el 100% de las farmacias de León están informatizadas, preparadas para funcionar, sólo falta la instalación de un pequeño aparato. Supondrá un coste para las farmacias y para el colegio. Lo más problemático será en los consultorios de algunos pueblos.

-”¿Cuál es el papel del farmacéutico en la atención a domicilio?

-”Nuestra misión es la atención al paciente. Tenemos que estar vigilantes para que no se dupliquen los tratamientos. Puede ocurrir que el paciente acuda a un médico privado y otro de la sanidad pública, que le receten lo mismo pero con distinto nombre. Nuestra función es advertirle de que se trata del mismo medicamento. La farmacia detecta que se está duplicando el tratamiento. Día a día intentamos que el paciente cumpla con lo prescrito por el médico, que tenga unos hábitos de vida saludable, que cambio de dieta y haga ejercicio.

-”¿Hay lista de espera de farmacéuticos que solicitan abrir una oficina?

-”Hay varios concursos. Todos los meses se abren farmacias. Va en función del crecimiento de los núcleos de población. Cada dos mil habitantes tiene que haber una farmacia.

-”¿De qué manera afecta el plan Bolonia a los farmacéuticos?

-”La universidad de Salamanca de Farmacia es una de las pioneras en el plan Bolonia. De cara al colegio no afecta nada.

-”¿Cuál es el principal problema al que os enfrentáis como colectivo?

-”La distribución de las guardias. En este momento está garantizado el acceso al medicamento las 24 horas del día, pero hay que racionalizar los horarios sin que se pierda el valor. Hay pueblos en la montaña que están de guardia de manera casi permanente.

-”¿Cuál es la propuesta del colegio?

-”Trabajamos con la Junta de Castilla y León para organizar las áreas de salud. Se intentará que en cada veinte kilómetros haya una farmacia de guardia o a los veinte minutos en coche.