Con muchísimo gusto

Esta previsto retirarlo el 7 de noviembre pasado, pero el arrollador éxito del menú 80 Aniversario ha obligado a los responsables de Paradores a mantenerlo en la carta hasta final de año. Lo han hecho con la legítima satisfacción de haber establecido un récord en la hostelería española -”400.000 menús vendidos a un precio de 20 euros-”, pero con una solución realmente ingeniosa: agrupar en una carta única los platos más demandados en los noventa y tres centros a lo largo de esta celebración gastronómica del ochenta aniversario de la red de establecimientos que ahora presiden y dirigen dos leoneses, Miguel Martínez y Manuel Miguélez, respectivamente. De esos noventa y tres platos -”cada uno de ellos había sido diseñado por un centro y llevaba el nombre de ese parador-” se seleccionaron el tiznao manchego, del parador de Manzanares (Ciudad Real); el solomillo ibérico con torta de La Serena y cardillos, de Mérida; el rape en gazpachuelo, de Gibralfaro (Málaga), el pollo de aldea guisado con repollo, de Santiago de Compostela; las alubias de La Bañeza con chorizo, de León: las alcachofas con pato, de El Saler (Valencia); la vieira a la gallega, de Baiona (Pontevedra) y las migas alcalaínas, de Alcalá de Henares (Madrid). Hasta el 22 de diciembre se ofrecen en todos los centros y como segundo plato los menús que han pasado esta selección, detrás de unos entremeses, a modo de tapas, que incluyen cuatro sugerencias frías y otras tres calientes, comunes para todos. Esos siete entretenimientos , que así se citan en la carta, comunes en todos los menús, son cuatro fríos -”esqueixada (ensalada de bacalao y escarola), el lomo de cerdo de orza, pan con tomate y jamón ibérico y escabeche de perdiz con berros-” y tres calientes: soldadito de Pavía (agujas de bacalao rebozadas), caldo de puchero con albondiguilla y manita de ibérico tostada rellena de hongos.

David Lorenzo, el joven director del Hostal San Marcos, asegura que con esta iniciativa Paradores ha querido presentar una oferta representativa de toda la gastronomía española, eligiendo platos muy característicos de los lugares en los que la red tiene establecimientos. La propuesta ha sido un éxito: «Hemos democratizado nuestros comedores», admite Lorenzo, legítimamente satisfecho de que el menú haya servicio también para ampliar la clientela de la red.