Desigual se reinventa sin perder su esencia

Ni temperaturas permanentemente bajo cero y ni la amenaza de la inminente llegada de la ola polar más fría en décadas, hacen desistir a muchas de las asistentes a la Semana de la Moda de Nueva York de ir sin medias. Llevar las piernas tapadas, incluso en pleno mes de febrero, es el pecado más grande que puede realizar hoy por hoy cualquier 'it girl' que se precie. Y así, con sandalias y las pantorrillas al aire, asistieron muchas de las invitadas, ayer, al desfile de Desigual, la primera de las firmas españolas en debutar en la pasarela neoyorquina. La marca que lleva por lema 'La vida es chula' realizó el cuarto de sus desfiles desde que en el 2013 empezó a participar en la cita, y fue, según Manel Jadraque, su director general, la presentación del "nuevo Desigual".

¿Significa que la firma ha abandonado su explosión de color y grafismo? No. La colección de otoño-invierno mostrada ayer sigue siendo puro Desigual pero su paleta y sus estampados se han suavizado, sus formas se han redondeado y todo resulta más limpio. Un conjunto "más sofisticado y creativo", según Jadraque, que "mezcla arte y moda" y lleva el ADN de Christian Lacroix, la mano creativa que hay detrás de los 43 modelos que ayer se pudieron ver en el cuerpo de dos 'ángeles' de Victoria’s Secret, el de Behati Prinsloo --novia del cantante de Marron 5, Adam Levine-- y la promesa de la pasarela Barbara Fialho. Desfiló también Chantelle Winnie, embajadora de la firma barcelonesa y primera 'top model' con vitíligo.

Se vieron looks de todo tipo y estilos infinitos. Prendas con motivos geométricos en blanco y negro, cárdigans étnicos multicolor con sabor escandinavo, vestidos naive muy estructurados, tules y gasas estampadas con acuarela, bordados de guipur, prendas de pelo y abrigos con volúmenes redondeados, todo al más puro estilo Lacroix. Y en el 'frontrow', disfrutando del espectáculo, brillaba una simpática Adriana Lima, otro 'ángel' que en ocasiones anteriores ha desfilado para Desigual; y una menos expresiva, pero también con la sonrisa dibujada, Katie Holmes. La ex de Tom Cruise y madre de Suri, la niña que marca tendencias, poco dijo más allá de pregonar su amor por Desigual; de su nuevo trabajo, en la serie 'Ray Donovan', ni una pista, lo prohíbe el contrato. La terna de guapas en primera fila la completaba Lena Gercke, cuya fama se la debe a su marido, el madridista Sami Khedira.

La nota neoyorquina la pusieron dos it girls del momento: Harley Viera Newton y Langley Fox Hemingway. La primera autora de la música que puso ritmo al desfile y la segunda creadora de la escenografía. Ambas aplaudieron desde el frontrow. La descendiente de Isaac Newton, luciendo piernas desnudas, por supuesto; la biznieta del autor de El viejo y el mar llevaba pantalones, otro de los must de la moda actual.