Alba Carrillo: "Me atrevo con todo, porque soy un poco payasa"

La modelo Alba Carrillo se ha incorporado a Tele 5 como presentadora de 'Hable con ellas' (lunes, 22.00 horas) en plena ebullición de su contencioso con el tenista Feliciano López por su prematuro divorcio. Aquí explica cómo está siendo su nueva experiencia profesional después de su agitado año de matrimonio.

¿Es usted el fichaje estrella de esta edición de 'Hable con ellas'? No, no. Me abruma eso de estrella.

¿Y el más sonado? Puede ser. Pero soy la bruja novata y me queda mucho que aprender. Voy a poner todas mis ganas porque me apetece muchísimo. Para mi esto es un regalo, y más en este momento de mi vida.

¿Cómo se ve en el programa? Bien. Hice la prueba y me veo bien porque es un formato divertido que no es un telediario. Lo mismo hay que cantar, que bailar… Creo que lo puedo hacer bien, aunque tengo mucho que aprender. También tengo unas buenas profesoras que me están ayudando mucho. Son grandes personas y me lo están poniendo muy fácil. Desde la prueba, que me dijeron que me iban a ayudar para que me quedase, hasta la grabación de los programas. Me dan consejos y ya vamos teniendo confianza y complicidad.

¿Veía el programa? Sí.

¿Y se veía en el puesto de alguna de ellas? Para mi era un sueño estar aquí. Por eso quiero aprovechar mi oportunidad.

¿Qué le han corregido sus compañeras? Corregir, corregir, nada. Me van diciendo lo que hay que ir haciendo. Y me van guiando en Tele 5 porque no sabía ni donde estaba la cafetería.

¿Cómo le llegó la oferta? Ya había hecho un par de 'castings' para La Fábrica de la Tele de cosas que después no habían salido, pero ellos habían quedado contentos. Estábamos con ese tema cuando surgió lo otro. Ha sido como una cosa paralela, pero igualmente tuve que hacer mi prueba. Me imagino que habrá sido un punto a favor, porque no nos podemos engañar, todo lo que me ha pasado en mi vida personal, pero si no haces bien la prueba y no ven que puedes tener potencial no te cogen de presentadora.

¿Cómo lleva trabajar para la misma productora de 'Sálvame', un programa en el que se habla constantemente de su vida privada? Bueno, intento desconectar porque si no te vuelves loca. Yo estoy aquí para intentar ser profesional, aprender mucho y divertirme. Y lo otro, pues como no tengo casi tiempo y estoy a tope… Cuando no controlas bien algo, estás tan vulnerable que requiere mucho esfuerzo y no tengo la cabeza para pensar en otras cosas.

¿Qué cree que puede aportar al grupo? La gente no lo sabe, pero soy bastante divertida y un poco payasa. Eso en el programa va a venir bien. También puedo aportar inocencia y naturalidad en cosas que no sé manejar y en las que seré el contrapunto de la experiencia de Sandra Barneda.

¿Qué queda de aquella chica que participó en 'Supermodelo 2007'? Pues hay 10 años de diferencia, experiencias vitales y evolución. Hay mil cosas que no haría igual ahora.

En aquel concurso era la mala del grupo… No dejaba de ser un 'reality' en el que tienen que dar a cada una un personaje. Pero ser la mala también es interesante. Para que haya buena tiene que haber mala. Aquí se van a ver todas las caras de las presentadoras porque el programa da para mucho: para sensibilizarse, para estar contenta… Se me verá enfadada, triste, alegre…

¿Hay algo que no se atrevería a hacer en el programa? En principio no. Me atrevo con todo. Pero es mejor que no diga esto porque a lo mejor lo aprovechan y me traen una serpiente.

¿Cuál de las cinco le hacía más gracia cuando veía el programa? Alison, la americana, me hacía gracia porque no se enteraba mucho. La inocencia y el descontrol puede ser una cosa atractiva.

Estuvo muy sincera en su entrevista del primer día. ¿Le salió así o era algo premeditado? Me sorprendí a mi misma, que es lo bueno que tiene este programa. Estuve a gusto, a pesar de que creía que iba a estar más nerviosa. Me daba miedo la reacción del público y sentía pudor de contar mi historia delante de tanta gente. Pero me sentí muy bien con mis compañeras. Y muy cómoda. Yo dejé fluir todo mi sentimiento, como en otros momentos del programa. Intenté ser yo.

¿Fueron duras sus compañeras? Bueno hubo momentos tensos, pero es que tienen que ser así. Yo también lo hubiera sido. Hay cosas que si no entiendes las preguntas. No hay pregunta mal hecha, sino gente que no sabe responderla.

¿Le da miedo que el programa se convierta en un serial de su historia con Feliciano López? No. Teníamos claro que no podías aparecer allí y no hablar del tema. Eso ha valido un poco para cerrar una etapa y abrir otra como presentadora. No vamos a alargar esto como si fueran fascículos.

¿Cree que la han fichado por su divorcio? Siempre tienen que decir algo. Pero no creo que sea así. Eso es poner en duda la profesionalidad de La Fábrica de la Tele (productora) y de Tele 5 porque si quieren tener una entrevista de un personaje no tienen por qué contratarle como presentador. Mi director, que confía en mi, me ha dado a entender que han visto que puedo hacerlo bien y aprender.

¿Le va venido bien este trabajo como vía de escape en momentos tan duros como los que vive? Sí, a veces un nuevo reto como este te hace estar más centrado en algo y te ayuda a olvidar otras cosas.

¿Hasta dónde querría llegar en la tele? Quiero aprender sobre todo. Para tener ambición hay que ser humilde. Pero yo no me considero ambiciosa. Quiero mejorar.

¿Qué le gustaría hacer en televisión? Cosas serias no, porque me gusta pasármelo bien. Este es el formato ideal. Soy divertida.

El ‘Sálvame’ también es divertido… No, no. No es el estilo de 'Hable con ellas'.

¿Y un 'talent' de modelos? Eso sí. No me importaría que se volviera hacer 'Supermodelo' y presentarlo.