'REALITY' POLÉMICO
La Fiscalía portuguesa investiga 'Supernanny'
El primer capítulo ha sido criticado por organizaciones de defensa de la infancia y psicólogos+
Con el nuevo año han empezado en Portugal las emisiones de 'Supernanny', popular formato internacional que pretende aconsejar a los padres sobre la educación de sus hijos. Aunque solo se ha emitido el primer capítulo, ya ha sido suficiente para que el país se haya volcado en contra de sus emisiones al considerar que violar los derechos de los niños.
La Comisión de Protección de Niños y Jóvenes fue la primera en quejarse abiertamente del programa. Llegó a pedir que se retirase el episodio de la página web para así evitar su emisión. Ante las negativas del programa, la Fiscalía portuguesa entró a escena y ha abierto una investigación contra la cadena SIC, emisora del programa, por un posible delito de desobediencia.
Lluvia de críticas y controversia
El pasado 14 de enero se emitió el primer capítulo de 'Supernanny' y desde entonces las críticas no han cesado. El programa ha generado gran controversia en todo el país. A parte de los actores citados anteriormente, la Comisión Nacional de Promoción de los Derechos y Portección de los Niños y Jóvenes de Portugal, ha divulgado un duro comunicado en el que afirma que "existe un elevado riesgo de violar los derechos de los niños" en las emisiones del programa.
En concreto, la Comisión considera que el el formato es "manifiestamente contrario al interés superior del menor, pudiendo producir efectos nefastos en su personalidad". Algunos psicólogos también se han unido a las críticas al considerar inadecuados algunos de sus contenidos.
El programa se defiende
Ante todas estas protestas, los responsables del programa ha lanzado un comunicado en el que se defiende de las críticas. En él recuerda que 'Supernanny' nació en el 2004 en el Reino Unido y que desde entonces se ha producido y emitido sin problemas, y con una gran aceptación, en países como Alemania, Francia, Suecia y España (que presentaba Rocío Ramos-Paul). Añade que en estos países "los patrones de protección de los derechos de los menores no se revelan menos exigentes" que en Portugal.
En el caso de Francia sin embargo, el programa también generó alguna controversia. Las protestas se personificaron en la 'supernanny' francesa en cuestión, Sylvie Jenaly. En el país galo se llegaron a recoger más de 2.000 firmas que condenaban los métodos empleados por Jenaly en el programa.