HILO EN TWITTER
La angustia de una joven al verse rodeada por siete hombres en un callejón
Amalia cuenta cómo al salir del restaurante en el que trabaja fue acosada por varios hombres: "No he tenido más miedo en mi vida"
Amaila quiso desahogarse en Twitter en cuanto tuvo la calma suficiente para contar lo que le había sucedido la noche anterior. "Desgraciadamente no os sorprenderá", asegura. "Os prometo que no he tenido más miedo en mi vida".
Los hechos sucedieron al cerrar el restaurante holandés en el que trabaja. Tocaba limpiar todo, y parte de su tarea implica sacar un cubo con trapos sucios a la calle, sacudirlos y poner la lavadora. El problema es que tenía que salir a una zona estrecha, oscura, y muy tarde.
El restaurante está en una calle bastante estrecha, y la puerta de la cocina está como a unos 3-4 metros de la intersección con otro callejón. Sobre las 23:30 salí a sacudir los trapos. La acera es MUY estrecha, así que me puse en cuclillas mirando hacia la pared.
— Amalia 🌵🌻 (@trufatartufa) 10 de noviembre de 2018
Entonces vivió los segundos más angustiosos de su vida. Pese a que el grupo de hombres pasaba de largo en principio, al verla se pararon y le dijeron algo de lo que solo entendió una parte.
Un grupo de unos siete hombres de entre 25 y 30 años pasaron de largo por la intersección. De repente paran y escucho algo en holandés. Tengamos en cuenta que yo entiendo muy poco, y las cosas que no escucho a diario, tardo segundos en procesarlas.
— Amalia 🌵🌻 (@trufatartufa) 10 de noviembre de 2018
En unos instantes, la tenían rodeada. Ella estaba totalmente indefensa.
Cuando me di cuenta de lo que habían dicho, algo relacionado con “chica, guapa, sola” habían vuelto, y me estaban rodeando. Yo estaba agachada, de espaldas a ellos y sola. Estaban cada vez más cerca. Muy cerca. Y al mirar de reojo vi que tenía ambas salidas bloqueadas.
— Amalia 🌵🌻 (@trufatartufa) 10 de noviembre de 2018
Hablaban entre ellos, se reían y se pasaban un botellín. Ella no entendía nada porque todavía no controla el idioma. No había nadie alrededor, solo siete hombres. Afortunadamente, alguien del restaurante se dio cuenta de la escena e intervino.
Sin poder dormir toda la noche, no paró de darle vueltas a lo que habría podido suceder de no ser por esta última aparición.
Hasta el cierre estuve totalmente paralizada. Salí y llamé a mi mejor amiga. He tenido pesadillas. He llamado a mi madre a las 8 de la mañana. Y luego me he tirado un buen rato llorando.
— Amalia 🌵🌻 (@trufatartufa) 10 de noviembre de 2018
Jamás había tenido tantísimo miedo, porque jamás lo había tenido tan cerca.
Sabes que contra uno puedes tener la posibilidad de huir. Pero contra siete, es imposible.
— Amalia 🌵🌻 (@trufatartufa) 10 de noviembre de 2018
Amalia está segura de que apenas fueron unos 30 segundos, pero fueron los 30 segundos más largos de su vida. "Me pareció una eternidad". Estaba paralizada por el miedo. Y, como relata para finalizar, lo peor es que se siente afortunada.
¿Y sabéis lo peor? Que una parte de mí siente que no tengo nada de lo que quejarme. Que tuve muchísima suerte, porque podría no estar para contarlo.
— Amalia 🌵🌻 (@trufatartufa) 10 de noviembre de 2018
Que tengo que sentirme aliviada porque no me rozaron.