EN MENORCA
Candela Serrat se da el 'sí, quiero' con Daniel Muriel
La actriz llegó al altar del brazo de su padre, el cantautor Joan Manuel Serrat
Candela Serrat, la hija pequeña de Joan Manuel Serrat, se ha dado el sí, quiero con su novio Daniel Muriel. La pareja de actores contrajo matrimonio el pasado sábado en Menorca, donde la familia Serrat tiene una casa en el puerto de Mahón.
La pareja de actores han celebrado una boda íntima rodeados de sus familiares y un reducido círculo de amigos. La novia, de 32 años, recorrió sonriente el pasillo hasta el altar del brazo de su padre, luciendo un vestido de estilo romántico de la diseñadora Rosa Clará. El diseño estaba compuesto de un cuerpo ceñido con escote halter elaborado con guipur italiano; una espalda escotada con tirantes cruzados; una voluminosa falda de tul plumettii con detalles de vainica en la cintura y una espectacular sobrecola de tul. La novia, con un suave maquillaje y una coleta tipo bubble, ha completado su look nupcial con un velo elaborado en tul de seda y unos llamativos botines metalizados de la firma Lodi Shoes, diseñados exclusivamente para la ocasión. Por su parte, el novio eligió un traje del diseñador Félix Ramiro, con chaqueta en tono crudo y unos pantalones a rayas en azul y blanco.
Los novios se han encargado de hacer el enlace público a través de un comunicado emitido en su perfil de Instagram de los novios: "Pues se nos ha quedado un fin de semana precioso", ha escrito la intérprete junto a una simpática instantánea de la ceremonia.
La hija del cantautor catalán, fruto de su matrimonio con la modelo Candela Tiffón, conoció al actor vallisoletano hace tras años durante el rodaje de la serie Seis Hermanas. Fue en mayo de 2016, cuando la revista Diez Minutos publicó la noticia del noviazgo con una imagen de los actores paseando por el centro de Madrid.
Cuando la noticia salió a la luz, muchos seguidores de Muriel se sorprendieron porque creían que el actor continuaba saliendo con Cristina Castaño, su compañera en la obra de teatro Cabaret, pero él ya había rehecho su vida junto a Candela. Así, Muriel había encadenado una relación con otra, como ya le ocurrió un año antes con Flora González, la chica del tiempo de Telecinco 5, a la que dejó tras cinco años de noviazgo para continuar con Castaño.