Casa Real británica
Kate Middleton cumple 40 años en su mejor momento
Tres retratos a cargo del fotógrafo de moda Paolo Roversi conmemoran su aniversario, en los que muestra su lado íntimo, desenfadado y regio
Escándalos televisados con Harry y Meghan como protagonistas, la enfermedad y fallecimiento del marido de la reina Isabel II, el príncipe de Edimburgo, y el confinamiento por la pandemia del coronavirus han protagonizado el último año de la familia real británica.
En medio de esa marejada, Kate Middleton y el príncipe Guillermo han sido figuras de estabilidad y, de forma muy especial, ella se ha convertido en un referente para la sociedad inglesa que se escandaliza con las salidas de tono de su primer ministro. Kate ha cumplido 40 años este domingo en su mejor momento, con la elegancia, la profesionalidad y la templanza como virtudes en su papel de madre, esposa y aspirante a futura reina.
Su historia comienza en el sureste de Inglaterra, concretamente en Chapel Row, el pueblo en el que creció. Estudió Historia del Arte en la Universidad de St. Andrews, donde conoció al príncipe Guillermo en 2001. Aunque nació en una familia de clase media alta, sus antepasados estaban relacionados con la realeza británica y habían participado activamente en la política del país. De hecho, su abuelo paterno fue piloto junto al príncipe Felipe durante un tour en Sudamérica en 1962. Su origen más o menos humilde (sus padres se conocieron trabajando para British Airways) no ha sido óbice para convertirse en una figura querida por su familia política y por los súbditos británicos.
En este último año ha conseguido proyectar su imagen hasta alcanzar sus mayores cotas de popularidad. A sus 95 años y con el coronavirus acechando, la reina Isabel II ha ido transmitiendo funciones de representación a su hijo y heredero a la corona, el príncipe Carlos, y a su mujer, Camilla Parker-Bowles, pero también a Kate, que junto a su esposo, el príncipe Guillermo, y sus tres hijos, Jorge, Carlota y Luis, encarnan la estabilidad y el futuro de la monarquía británica, no exenta de vaivenes y escándalos mediáticos. Modelo de elegancia Con motivo de su 40 aniversario, la duquesa se ha convertido en una auténtica estrella protagonizando tres retratos realizados por el reconocido fotógrafo de moda Paolo Roversi.
Tres instantáneas en las que se pueden apreciar sendas perspectivas de la protagonista: su imagen más íntima, con un primer plano de su rostro sonriendo ampliamente y el cabello cayendo a un lado de su rostro de forma estudiadamente desenfadada; su faceta más actual, con un vestido rojo de Alexander MacQueen de escote asimétrico; y su aspecto más regio, posando con un voluminoso vestido de tul blanco con escote barco y la mirada anclada en el horizonte.
Estas fotografías han sido el colofón de un año en el que ha brillado con luz propia protagonizando numerosas portadas por su elegancia. Especialmente sonado fue su elección para el estreno de la película de 007, 'Sin tiempo para morir'.
Un evento a lo grande en el Royal Albert Hall de Londres en el que Kate fue la auténtica estrella con un vestido de su diseñadora fetiche, Jenny Packham, repleto de lentejuelas doradas y plateadas con escote y uve y mangas a modo de capa. Un modelo perteneciente a una colección cápsula realizada por la reconocida creadora en colaboración con EON Productios formada por ocho diseños que rendían homenaje al legado de los personajes femeninos más poderosos de la saga de películas del agente británico.
Más recientemente, el pasado 8 de diciembre, volvió a dar la campanada, esta vez al desvelar su talento al piano en el espectáculo Royal Carols: Together at Christmas (Villancicos reales: Juntos en Navidad).
Un evento ideado por la propia Kate para rendir homenaje a las personas y organizaciones que habían trabajado a favor de su comunidad durante la pandemia. Personal de organizaciones sociales, profesores, trabajadores esenciales, miembros de la Fuerzas Armadas y personal sanitario se congregaron en la abadía de Westminster donde Kate acompañó al piano al cantante escocés Tom Walker, sorprendiendo al público presente y a las miles de personas que lo vieron por televisión. Y es que, a pesar de ser una mujer introvertida, su matrimonio con el príncipe Guillermo la ha obligado a asumir labores públicas que no podía imaginar y ha hecho de la profesionalidad su estandarte. Aunque todavía hay quien la considera demasiado estricta o impostada, cada día son más lo que caen rendidos a sus encantos