El estilo 'coquette'
Lazos, gamas pastel, volantes y una imagen que camina entre lo femenino y lo naíf. La estética ‘coquette’ -literalmente, coqueta en francés- se convierte en una de las tendencias del momento y experimenta un resurgir tras su auge en los años 2000, aglutinando millones de publicaciones en redes sociales
ORIGEN FRANCÉS. El primer referente del estilo ‘coquette’ es la vestimenta del siglo XVIII y el rococó, con figuras como la reina María Antonieta, un icono de estilo entre brocados, satenes y encajes, componentes de un estilo muy femenino. LANA DEL REY. La artista Lana del Rey se ha convertido en una de las pioneras de esta tendencia. REFERENTES. Ariana Grande es otra de las grandes de la canción que se ha animado con el ‘coquette’ y se ha convertido en un referente para los seguidores de este estilo. GENERACIÓN Z. La generación Z es la responsable de haber popularizado esta tendencia, especialmente en las redes sociales.
De María Antonieta a Lana del Rey. Tejidos satinados, lazos como emblema y elementos que recuerdan a la vestimenta propia de las niñas pequeñas, como la mezcla de zapatos con calcetín claro a lo colegiala, conforman esta tendencia que acumula más de veinte millones de publicaciones etiquetadas bajo este término en TikTok.
Aunque experimenta un auge en pasarelas, estilo a pie de calle y en redes sociales, la tendencia ‘coquette’ no es nueva. Su primera embajadora y referente es la vestimenta del siglo XVIII y el rococó, con figuras como la reina María Antonieta, un icono de estilo entre brocados, satenes y encajes, componentes de un estilo muy femenino.
La regencia y los emblemáticos vestidos de muñeca de la época también perfilan la inspiración de la tendencia, que después aterrizaría en los tardíos noventa y en los dos mil no solo directamente en el mundo de la moda, sino también en la gran pantalla, desde donde se convertiría en inspiración y altavoz.
Así es como ‘coquette’ ha evolucionado de los adornos como símbolo desde la corte francesa, donde moños, ribetes y delicados brocados eran uno de los sellos distintivos de la monarca, que trascendería también por su exquisita y cuidada imagen, a la cultura de los años noventa, donde la cineasta Sofia Coppola rescataría este imaginario.
Es precisamente esta directora de cine una de las responsables de enmarcar esta tendencia en los tardíos años noventa y el año 2000, de la mano de, precisamente, su película tributo a esta reina ‘María Antonieta’ (2006) o la indumentaria de una de sus películas insignia, ‘Vírgenes suicidas’ (1999).
En ambas películas los lazos, los colores pastel, los encajes y las prendas de tejidos satinados eran casi tan protagonistas como las propias historias, convirtiendo esta herramienta estética en un elemento diferenciador de su cine, junto a otros hitos ‘coquette’ como ‘Lolita’ (1997) de Adrian Lyne, adaptación de la novela de Nobokov.
Trenzas, moños con tirabuzones, blusas en tonalidades claras y abultadas y vaporosos vestidos de corte romántico y aire inocente marcaron el vestuario del filme y también dibujaron un sello estético que, con el auge de la moda de los años dos mil, vuelve ahora con fuerza para posicionarse como una de las tendencias del momento.
Una de sus embajadoras actuales es la vocalista Lana del Rey que, si desde su implosión en el panorama musical en 2011 hasta ahora ha optado por este estilo, ahora lo refuerza al protagonizar la campaña de San Valentín de la firma de Kim Kardashian, Skims, llena de lazos y elementos del imaginario ‘coquette’.
Con una camiseta rosa de tirantes ribeteada en blanco, un lazo rosa sujetando un mechón de su cabello y guantes por encima del codo, Lana del Rey y esta campaña se han convertido en uno de los contenidos más compartidos como inspiración de lo ‘coquette’.
Este estilo también inunda las últimas colecciones presentadas en los epicentros de la moda como París, Nueva York, Milán y Londres durante las semanas de la moda, en la que grandes firmas se hacen eco de algunos de los sellos estéticos de la temporada desde el pasado septiembre y hasta la Alta Costura de las últimas semanas de enero.
Desde las coletas coronadas por grandes lazos negros en el desfile de Chanel de París durante la semana de Alta Costura, a la última colección de la firma ‘La veste’, llena de grandes solapas y voluminosos lazos sobre la parte del cuello de blusas y camisas.
Durante los primeros coletazos de la tendencia, Alessandra Rich presentaba una colección copada de lazos, tules y vestidos mini en satén y color vainilla que recuerdan a los de colegiala, en contraste a Carolina Herrera, que a modo de cinturón y en clave XL, añadía lazos para decorar sus vestidos largos en colores sólidos.
No es la primera vez que este estilo se hace con la pasarela, puesto que uno de los desfiles más recordados de 1998 y posteriormente en 2004 fueron los de la firma Blumarine, consagrados a esta tendencia y en presentaciones que subieron a la pasarela grandes supermodelos del momento como Linda Evangelista.
La tendencia también viste a los asistentes de las semanas de la moda a pie de calle; de Emili Sindlev hasta Alexa Chung o celebridades como Ariana Grande, Taylor Swift, Elle Fanning o Sabrina Carpenter, que se convierten en grandes embajadoras de este estilo en alfombras rojas y apariciones públicas.
Entre los grandes admiradores de la tendencia, la Generación Z.