Federico y Mary se van otra vez de vacaciones

Cuando la reina Margarita informó por sorpresa a los daneses de su decisión de abdicación en su discurso de Año Nuevo, pocos podían imaginar que la veterana monarca tendría que recuperar su labor como regente en dos ocasiones durante el primer trimestre del año. Y es que el rey Federico y su familia ha decidido tomarse unos días de asueto durante la Semana Santa. Estas son las segundas vacaciones desde su entronización el pasado 14 de enero, lo que ha suscitado numerosas críticas en el país. 'La familia real pasa unas vacaciones secretas de Pascua en el extranjero', tituló Her & Nu; 'El rey de vacaciones ha dado otro golpe: ha viajado con su familia', recoge Ekstra Bladet; mientras Se og Hør tilda de "inaccesible" a la pareja real, sobre la que dice que está "escondida en su castillo".

Lo cierto es que Federico X ya advirtió sobre la importancia de su tiempo libre en el discurso de su coronación. "Haremos las cosas de forma diferente a mi madre, tanto en lo que se refiere a la organización y gestión de la familia real como a la forma de alternar el trabajo y el ocio en familia", dijo, haciendo especial hincapié en el descanso: "El tiempo libre es importante porque probablemente tendremos aún más cosas que hacer. Mary y yo tenemos áreas de interés que requerirán cada vez más nuestra presencia en diversos foros dentro y fuera del país". Así, solo dos semanas después de su nombramiento como rey, el monarca y su familia se tomaron sus primeras vacaciones de invierno viajando a su lujosa residencia de los Alpes suizos, una vivienda en la estación de Verbier a la que van todas las temporadas. Que se tratara de una tradición familiar no restó sorpresa entre sus súbditos, aunque las críticas fueron más bien tibias.

Plan privado Sin embargo, que con motivo de la Semana Santa hayan decidido volver a tomarse un descanso, esta vez, sin que nadie sepa a dónde han viajado, ya que se trata de planes privados, ha hecho que los medios hayan sido menos cautelosos. Más aún, teniendo en cuenta que esta nueva escapada rompe con la tradición familiar, ya que hasta ahora solían pasar estos días en el palacio de Marselisborg. Habrá que ver si también rompen con la costumbre de acudir en familia a la misa de Pascua en la catedral de Aarhus o si para entonces ya están de vuelta en Dinamarca.

Mientras tanto, la prensa danesa lamenta que "en lugar de reunirse con los daneses como nueva pareja real, Federico y Mary se han atrincherado en gran medida tras los muros del castillo". A este respecto, el experto en realeza Lars Hovbakke Sørensen valora que "si este es el nuevo estilo, existe el peligro de que se vuelvan cada vez más invisibles con el tiempo", por lo que considera que "permanecer tan en segundo plano es un arma de doble filo". "Nos hemos acostumbrado a acercarnos a la realeza en las últimas décadas, así que hay una expectativa entre la población de que así es como debe ser. Y por eso puede ser contraproducente si se hace al revés", reflexiona.