Las diez actuaciones claves
La doctora Kerry Allen expuso durante el congreso la necesidad de una visión general sobre las medidas de prevención y el impacto significativo que, según su experiencia en el Reino Unido, la adopción de algunas medidas o intervenciones de carácter «simple» tienen sobre la salud y el bienestar de las personas mayores.
La doctora identifica hasta diez actuaciones clave, que propone integrar en los programas de atención para prevenir la dependencia de las personas mayores. Estas son: la promoción de estilos de vida saludables, campañas de vacunación y chequeos preventivos, prevención de caídas, adaptación de los hogares y apoyo práctico, rehabilitación, asistencia tecnológica y telecuidado, trabajos de colaboración, cuidados intermedios y un tratamiento personalizado.
Sobre la importancia de la actividad física como instrumento de prevención de la enfermedad y la dependencia intervino también el secretario general de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, Alfredo Cohórquez, quien manifestó que «lo que más condiciona a un mayor no es la edad, sino las enfermedades. Independientemente de la edad, se puede estar en perfectas condiciones físicas si se mantiene un estilo de vida saludable».
Bohórquez enumeró los efectos beneficiosos de la actividad sífica como que frena la descalcificación ósea, reduce el riesgo de infarto y de enfermedades coronarias, aumenta la capacidad respiratoria, disminuye la formación de depósitos renales, evita la obesidad, aumenta la estimulación sensorial y refuerza la actividad intelectual, así como previene y mejora las enfermedades crónicas como la osteoporosis, la diabetes mellitus, la artrosis y la depresión, entre otras patologías.