Decisión compartida

ana gaitero

LEÓN

Una de cada mil personas se enfrenta cada año a la enfermedad renal crónica. No tiene cura. El 50% tienen la suerte de recibir un trasplante. El otro 50% recurren a un tratamiento de diálisis de forma temporal —mientras esperan un donante— o de por vida.

Mario Prieto, nefrólogo del Hospital de León, acaba de presentar en el 14º Congreso Internacional de Diálisis Peritoneal un estudio realizado en 17 centros sanitarios españoles para extender el uso de una herramienta que ayuda a los pacientes y a sus familiares a tomar la decisión sobre la modalidad de diálisis que mejor se adapta a sus valores y a su estilo de vida.

Un total de 514 personas participaron en la investigación, de las cuales el 56% optaron por la hemodiálisis como modalidad inicial de tratamiento y el 43% por la diálisis peritoneal. En el congreso, celebrado en la capital de Malasia, «llamó la atención la escasa diferencia de estos resultados respecto a la elección que hicieron los pacientes tras pasar por el programa educativo», subraya el doctor Prieto. El 49% de las personas habían optado por hemodiálisis y el 48% por diálisis peritoneal.

De estas cifras se desprende un alto grado de eficacia de la herramienta desarrollada para la ayuda a la toma de la decisión compartida. «Hasta ahora, a los pacientes se les daba sobre todo información sanitaria, pero con este método se ponen en relación los valores y el estilo de vida de las personas para que adapten la diálisis a su vida y no su vida al tratamiento», indica el nefrólogo.

En el Hospital de León todos los pacientes que se enfrentan a la decisión de dializarse pasan por este proceso educativo que imparte el servicio de Nefrología. El programa se lleva a cabo en un mínimo de tres sesiones y cuenta con el apoyo de material gráfico y audiovisual que ha sido elaborado por los hospitales que han participado en la investigación.

En la primera visita, explica la enfermera Ana Aguilera, los pacientes y sus familiares reciben información sobre la enfermedad renal crónica y las opciones de diálisis.

Informar para elegir

La hemodiálisis es el método elegido por la mayoría de las personas que se someten a diálisis. El 90% de las personas con tratamiento sustitutivo de la función renal acuden al hospital a dializarse. Durante tres o cuatro días a la semana su vida transcurre conectada a una máquina para depurar su sangre de las toxinas que no pueden eliminar por la orina.

«Si una persona quiere trabajar a jornada completa o no le gusta estar tanto tiempo en el hospital, tiene la opción de hacer la diálisis peritoneal», apunta el nefrólogo. La diálisis peritoneal manual permite realizar el tratamiento en casa e incluso de viaje. Se realiza tres o cuatro veces al día y requiere entre 20 y 30 minutos cada día. Es el sistema más flexible.

La diálisis peritoneal automática también se realiza en casa o en el lugar de destino si viaja y se aprovechan las horas que determine el médico durante el sueño nocturno. Los pacientes se conectan a una máquina que proporciona el sistema sanitario y cuyo manejo es relativamente sencillo.

También existe la hemodiálisis domiciliaria, aunque actualmente no hay ninguna persona con este tratamiento en León. En este caso se requiere una instalación técnica y la presencia de otra persona mientras se realiza el tratamiento. Se realizan 5-6 sesiones a la semana de unas dos horas y media.

Salvo contraindicaciones médicas absolutas, «la última decisión es del paciente y su familia», recalcan en el servicio de Nefrología. «Usted es el miembro más importante en el cuidado de su salud», dicen a los pacientes en la primera entrevista.

En la segunda visita los pacientes responden a un cuestionario sobre el estilo de vida, que marcará la tendencia de su elección. En esta fase se utilizan las tarjetas de valores que orientan al paciente sobre sus preferencias vitales y también se les pone en contacto con otras personas que se dializan. «Se trata de que las personas vayan descubriendo por si mismas cómo se va adaptar el tratamiento a su vida», explica la enfermera. Finalmente, hay que elegir.