¿Qué puede dañar a mi bebé?
El servicio de información para la embarazada recibe cien llamadas telefónicas al año desde León, un apoyo de Sacyl y la Fundación 1000 para resolver dudas sobre los peligros en el periodo de gestación.
Los efectos de la medicación en el embarazo es lo que más preocupa tanto a las madres como a los profesionales sanitarios.
LEÓN
El 91 822 24 36 para las mujeres y el 91 822 435 para los médciso reciben una media de cien llamadas al año realizadas desde León, de las casi 800 que se hacen desde todas las provincias de la Comunidad. Los profesionales pertenecientes al grupo científico de la asociación Estudio Colaborativo Español de Marformaciones Congénitas (ECEMC) resuelven las dudas y las inseguridades de médicos y embarazadas sobre los peligros para el embrión o feto de los diferentes agentes ambientales químicos o tratamientos farmacológicos, físicos o biológicos, que pueden afectar a la mujer embarazada, así como sobre aquellas otras cuestiones relacionadas con el cuidado y atención del embarazado. Castilla y León es una de las cuatro comunidades del país —Castilla y León, Asturias, Galicia, Cantabria y Murcia— que mantiene un convenio, por el que paga 25.000 euros, con la Fundación 1.000, para que las embarazadas y los médicos puedan llamar y resolver cualquier duda relacionada con la salud durante el embarazo. «Las demás comunidades han ido dejando este servicio por la crisis», explica la coordinadora del teléfono en el instituto en Madrid, María Luisa Martínez Frías. Frías partició en el Hospital de León en una jornada sobre teratología (estudio sobre las malformaciones). «Aunque la ciencia ha avanzado mucho hay factores ambientales que hay que tener en cuenta, así como la alimentación de la madre y el padre antes de la concepción», asegura.
El 3% de los bebés nacen con malformaciones congénitas física de origen desconocido. «Pero lo que sabemos es que podemos disminuir el riesgo sin tomamos medidas como la eliminación de la ingesta de alcohol, tabaco, drogas, algunos medicamentos y sustancias químicas que alteran al desarrollo embrionario». Sin embargo, no todos los fármacos están contraindicados en el embarazao. «Hay muchas enfermedades maternas que se pueden controlar con los fármacos y no usar esos fármacos sería mucho más perjudicial tanto para la madre como para el bebé», asegura Frías.
El cuidado de la salud durante el embarazo ha llevado a dentistas, farmacúeticos y nutricionistas se han unido en una campaña para fomentar una correcta alimentación y salud oral en el embarazo. Los dentistas recomiendan que se acuda a revisión en el segundo trimestre de embarazo, recuerdan que la sedación y los diagnósticos radiológicos no suponen un riesgo y desaconsejan los blanqueamientos dentales durante la gestación. Las 360 farmacias de la provincia ofrecerán asesoramiento y dispondrán de información práctica sobre la campaña. Por su parte, los nutricionistas recomiendan realizar entre cinco y seis comidas al día durante el embarazo y no renunciar a los «antojos» pero en raciones pequeñas, de forma esporádica y optando sobre todo por alimentos saludables.
Una buena alimentación
El ácido fólico en el primer trimestre del embarazo o incluso antes de la concepción es prioritario para prevenir la espina bífida. «Es muy importante aumentar las dosis de ácido fólico incrementando la ingesta de alimentos frescos de hoja verde», explica la presidenta de la Asociación Autónoma de Dietistas Nutricionistas de Castilla y León, Laura Carreño. «Cuando se avanza en el embarazo aumenta el volumen de sangre. Aunque al no haber pérdidas menstruales se ahorra hierro. no hay que bajar la guardia». La nutricionista asegura que el consumo de carnes rojas y vísceras es una apuesta segura para el aporte adecuado de hierro, «pero no se recomienda durante el embarazo por el aporte de grasa. Es mejor el consumo de pescados, carnes de ave o legumbres que aportan proteinas, hidratos de carbono y fibra. Pero hay que incorporar algún alimento rico en vitamina C, que facilita la absorción».
En el tercer trimestre adquiere relevancia la alimentación rica en calcio ya que se están creando los huesos del futuro hijo. «El cuerpo prioriza el feto y tira de las reservas de la madre que tiene riesgo de osteoporosis y huesos frágiles». Es el momento de los alimentos ricos en calcio.
Las embarazadas también tienen riesgo de sufrir estreñimiento por lo que las frutas, legumbres y cereales integrales deben formar parte de la dieta. La hidratación, con tres litros de agua al día, «es normal el estreñimiento si no hay una adecuada hidraación».