SALUD
Un duro muy blando
La consulta de Reumatología del Hospital de León atiende cada año a 1.500 nuevos pacientes con osteoporosis, la descalcificación del hueso que provoca 25.000 fracturas anuales en España.
LEÓN
Una de cada tres mujeres y uno de cada cinco hombres mayores de 50 años sufrirán una fractura ósea en su vida. La osteoporosis, enfermedad crónica y sistémica del esqueleto caracterizada por una alteración de la resistencia ósea, provoca 25.000 fracturas anuales en España. En el año 2025 el número de fracturas se duplicarán.
Además de disminuir la calidad de vida de los pacientes, las fracturas óseas suponen un coste directo de 126 millones de euros año y otros 420 millones indirectos. «No es una enfermedad grave, pero sus complicaciones pueden tener un alto coste», asegura el reumatólogo del Hospital de León, Manuel Martín Martínez. «Al aumentar la esperanza de vida aumenta la osteoporosis por eso es muy importante cuidar los huesos desde el crecimiento».
La definición de osteoporosis tiene en cuenta la densidad mineras ósea y la calidad ósea. «La mayoría de los pacientes que tratamos en la consulta de Reumatología vienen derivados por los médicos de Atención Primaria. Los perfiles mayoritarios son mujeres postmenopáusicas, pacientes con fracturas de bajo impacto o por antecedentes personales. Las personas en tratamiento con corticoides y con problemas del aparato digestivo son más propensas a padecer osteoporosis. «La mitad de las personas de más de 75 años tienen osteoporosis con pequeñas fracturas vertebrales asistomáticas», asegura el especialista. No duele. Esa es la razón por la que se la conoce como la enfermedad silente. «No da manifestación clínica. El hueso merma en calidad y resistencia hasta que se produce un traumatismo espontáneo o por sobrecarga». La densitometría es la única prueba que hace un contage de la densidad de masa ósea.
En España, aproximadamente 2 millones de mujeres padecen osteoporosis, con una prevalencia en la postmenopausia del 25% (1 de cada 4). Ocasiona unas 25.000 fracturas cada año. «La repercusión sociosanitaria de la osteoporosis es enorme y se mide en términos de incidencia de las fracturas».
Las roturas de caderas por caídas que causan en León 500 ingresos hospitalarios al año de personas mayores de 65 años, con una media de 12,4 días de hospitalización y un 7% de mortalidad. El mayor número de caídas se produce en personas con un índice de masa corporal menor al 20% y el 50% toma medicamentos como antidepresivos.
Un estudio realizado por el personal de Enfermería de Atención Primaria de León en el año 2015 demuestra que el 40% de las personas mayores de 65 años han sufrido al menos una caída y el y el 5% sufrieron una fractura y como consecuencia, el 25% fallecen en el primer año.
«Hay que concienciar a la población de que hay que tomar medidas». El especialistas en reumatología del Hospital de León pone el acento en la infancia y adolescencia para empezar a tomar medidas preventivas eficaces y, las que ya lo padecen, acometer un tratamiento adecuado. La gran mayoría de las personas con mayor riesgo de fractura (el 80%) no está identificado ni tratado. «La osteoporosis hay que prevenirla en la infancia con una dieta que lleva un aporte de calcio adecuado y hacer ejercicio físico, que es un estimulante del remodelado del hueso».
Es en la menopausia, con la pérdida de los estrógenos, cuando la descalcificación ósea se acelera y las mujeres quedan expuestas al riesgo de fractura, el auténtico riesgo de la enfermedad. Para prevenir hay que actuar activamente hasta los 22 años, la etapa de crecimiento en la que se adquiere la masa ósea que nos sustentará a lo largo de la vida. A partir de los 65 años, toda mujer que tiene osteoporosis debería recibir tratamiento durante diez años.
Entre los factores que influye en la pérdida de hueso están una alimentación inadecuada y la falta de ejercicio físico. La vitamina D es esencial en el tratamiento de la osteoporosis porque ayuda a fijar el calcio en los huesos. Se obtiene principalmente a través de la exposición a los rayos solares. «Y el tratamiento con fármacos que frenan la resorción ósea (destrucción del hueso) con bifosfonatos, análogos de los receptores estrogénicos y anticuerpos monoclonales», asegura Manuel Martín.
Pero no todas las mujeres a las que se detecta osteoporosis necesita tratamiento farmacológico. «Todo va a depender del riesgo de fractura».