«Falta la unidad de Consejo Genético Oncológico»
En la lucha contra el cáncer, con un 60% de supervivencia a día de hoy, hay mucho por hacer y también alguna deficiencia que se puede subsanar en la provincia leonesa.
«León no dispone de Consejo Genético, una unidad necesaria y con una función preventiva de indudable valor que evitaría desplazamientos de los ciudadanos leoneses a otras unidades de la Comunidad», admite Andrés García Palomo.
El Consejo Genético fue puesto en marcha en 2003 por la Junta de Castilla y León, pero las familias leonesas se ven obligadas a desplazarse, principalmente a Salamanca, para acceder a este programa.
Según datos del portal Sanidad Castilla y León de la Junta, los tumores en los que se puede realizar el consejo genético son el cáncer de mama y ovario hereditario (CMOH). Las mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2 se caracterizan por la predisposición al cáncer de mama y ovario hereditarios, así como al cáncer de próstata y de colon y a otros tumores.
Asimismo, en los programas de consejo genético se estudia el cáncer colorrectal hereditario (CCRH). La predisposición genética hereditaria al cáncer colorrectal incluye dos síndromes definidos como la Poliposis Adenomatosa Familiar (PAF) y el Cáncer Colorrectal Hereditario No Polipósico (CCHNP).
La poliposis adenomatosa familiar se transmite de forma autosómica dominante y está causada por mutaciones en las células germinales. Afecta por igual a ambos sexos. En un tercio de los casos se origina por mutación espontánea del gen APC, sin historia familiar previa de poliposis adenomatosa familiar.
Por último, está el cáncer colorrectal hereditario no poliscópico (CCHNP). Un tercio de los casos se origina por mutación espontánea del gen APC, sin historia familiar previa de poliposis adenomatosa familiar. Se caracteriza por la agregación familiar de un espectro de tumores que aparecen a una edad precoz