Los problemas familiares son la primera causa de las consultas

De La Coruña a Almeria. De Panamá a Brasil, pasando por todos los países europeos la consulta más repetida es la que se refiere a los problemas familiares. Pareja y hijos son los causantes de los mayores quebraderos de cabeza en las personas de todo el mundo. Según el presidente de la Asociación Internacional del Teléfono de la Esperanza, Jesús Madrid, en todos los países la principal temática de las consultas son las desavenencias en las familias y las rupturas matrimoniales. «El problema es común, aunque en cada país adquiere matices distintos», asegura. Para garantizar una correcta asistencia a la persona que solicita el servicio, el Teléfono de la Esperanza se ocupa de la preparación de los voluntarios. Los cursos de crecimiento personal son constantes en la ONG, «suele ocurrir que culpamos a los demás de lo que nos pasa y eso es porque tenemos un planteamiento incorrecto de las cosas», afirma Jesús Madrid. «Todos tenemos que compartir con los demás y necesitamos de los demás». Esta es la premisa que rige todos los planteamientos iniciales para poder ayudar a una persona con problemas. «La persona tiene que mirarse a sí misma porque a veces el problema está dentro de ella». Madrid sostiene que el Teléfono de la Esperanza tiene el programa de formación del voluntariado más completo de Europa. «Nosotros queremos que los cursos sirvan para nuestro crecimiento, para nuestra propia maduración, y también para ayudar a los demás. Necesitamos a gente que sepa escuchar, que no juzgue y que no de consejos baratos», sostiene. Incomunicación La incomunicación y la soledad suelen desencadenar problemas serios en las personas que necesitan descolgar el teféfono para encontrar a alguien que escuche sus problemas , «nuestro servicio hace de termómetro de la sociedad», sostiene. El 75% de las llamadas está relacionada con la incomprensión. De ahí se derivan muchas enfermedades mentales que son comunes en las grandes ciudades que tienen grandes lagos de incomunicación. El Teléfono de la Esperanza cuenta con departamentos especializados, atendidos por profesionales voluntarios en psicología, psiquiatría, asistencia social, asesoría jurídica, asesoría ético-moral y de orientación familiar. Los voluntarios, con un nivel técnico y especializado, respetan el anonimato, durante 24 horas con un servicio totalmente gratuito.