De los grupos de riesgo a las soluciones

Una de las grandes preocupaciones de los padres es que sus hijos caigan en la anorexia o la bulimia y enterarse demasiado tarde. Hay grupos de riesgo y soluciones Perfil del enfermo Tanto la anorexia como la bulimia son trastornos más propios de las chicas (9 de cada diez casos) y se suele dar entre las más jóvenes (de 12 a 20 años). Sin embargo, conviene no bajar la guardia porque los especialistas aseguran que cada vez hay más varones enfermos y también se ha ampliado el espectro de edades: se han detectado casos en niñas de 9 años y en adultos de más de 40. Actitudes En caso de que la enfermedad sea ya una realidad hay que abordar el asunto con sinceridad y claridad, sin forzar al enfermo a comer. Es preferible tratar de hacerle comprender su problema y su necesidad de apoyo profesional. Sólo en los casos extremos se usará una sonda nasogástrica para alimentar al paciente. En el caso de los padres con hijos aún pequeños que quieran prevenir estos problemas, lo importante es fomentar la autoestima y no transmitir complejos o una obsesión desmedida por el físico. Y, por supuesto, enseñarles a comer sano. No existe un solo factor que explique el origen de estas enfermedades, sino que se han de dar un conjunto de situaciones para que alguien sea más vulnerable o desarrollar estos trastornos.