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Baile de cunas en la nueva planta

Los bebés estarán a partir de ahora en la habitación con sus madres, salvo por indicación pediátrica, para facilitar la lactancia materna

Un niño en la sala de nidos, donde recibe sesiones de fototerapia para paliar la ictericia

León

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La opinión de los pediatras ha primado sobre los obstetras en la organización asistencial de la nueva planta de maternidad del Hospital de León. El tradicional sistema de nidos, que data de hace cuarenta años cuando se abrió la residencia Virgen Blanca, ha sido sustituido por cunas móviles que permitirán la permanencia de los bebés con sus madres en las habitaciones. El motivo fundamental es, según el jefe de Pediatría, que «la tendencia actual es favorecer la relación madre-hijo inmediatamente después del parto para fomentar la lactancia materna, que debe de ser a demanda». Con el sistema de nidos o cunas centralizados los recién nacidos iban con sus madres según un horario establecido, generalmente cada tres horas y cada cinco por la noche. Emilio Álvaro Iglesias, jefe de Pediatría del Hospital de León, subrayó que «nos interesa la lactancia materna para el futuro del recién nacido por lo que se sabe actualmente de nutrición». Actualmente, las matronas del hospital no realizan una promoción activa de la lactancia materna, lo que choca con los planes del área de promoción de la salud de Sacyl. La campaña pretende aumentar el número de lactantes que son alimentados a pecho durante los seis primeros meses de su vida, pues, según los últimos datos disponibles, sólo el 7,3% de las madres amamantan a sus hijos e hijas durante un tiempo tan prolongado. En la maternidad se proporciona a las mujeres material escrito y de sus paredes cuelgan carteles que incitan a la lactancia natural. Sin embargo, ningún centro hospitalario de León con maternidad (dos públicos y dos privados) forma parte de la red de hospitales amigos de los niños creada en 1989 por Unicef, al contrario de lo que sucede en centros catalanes y vascos e incluso comarcales como los asturianos de Coaña y Cangas de Narcea. Para conseguir a este título los hospitales tienen que contar con una política escrita relativa a la lactancia natural, capacitar al personal para ponerla en marcha, informar a todas las mujeres de sus beneficios y ayudarlas a iniciar la lactancia durante la primera hora después del parto. También deben mostrar a las madres cómo se debe dar de mamar al niño y cómo mantener la lactación incluso si han de separarse de sus hijos. Unicef desaconseja tajantemente dar alimentos ni bebidas a los niños que no sean la leche materna, salvo por indicación médica, como tampoco chupetes ni tetinas. Las matronas de atención primaria promocionan la lactancia materna en las clases de preparación al parto desde hace una década, pero se requiere un «esfuerzo» de los equipos hospitalarios. «Cuando digo a las mujeres que en el momento del parto pongan al pecho a sus hijos, estoy pidiendo que la persona que lleva el parto -matrona o médico- haga un esfuerzo», explica una matrona. Supone que el bebé esté diez o quince minutos más en la sala de partos y es posible que «la enfermera de nidos se queje de que el niño llega frío». En este sentido, recaba «más formación y tal vez más personal». Poco espacio en nidos La nueva «filosofía» se pone en marcha esta semana una vez abierta la planta al completo, que cuenta con nueve habitaciones individuales y 14 dobles. Las 37 camas son el mismo número que había en el Princesa Sofía. El aumento de los nacimientos -la planta anterior fue habilitada en las horas más bajas de la natalidad en León- no se ha tenido en cuenta. Otra razón de la nueva organización es el escaso espacio de que disponen en la sala de nidos para atender a la totalidad de recién nacidos que puede haber en un momento dado en el Hospital de León. El sistema Rumin -cunas giratorias- que permite la permanencia del bebé con la madre o su traslado automático, con sólo girar la cuna, a un control de nidos fue rechazado en el diseño del nuevo hospital por considerarse «poco operativo», pues supone que cada dos habitaciones tendría que haber otra de control para cuatro cunas. La antigua residencia Camino de Santiago de Ponferrada disponía de cunas giratorias en las habitaciones de maternidad hasta la apertura del Hospital del Bierzo a principios de los 90. Actualmente, utilizan el mismo sistema de cunas móviles que se ha escogido para el Hospital de León.