La unidad de ictus pendiente

En León se producen unos 1.500 ictus al año de los cuales una tercera parte son atendidos en el Hospital de León. Las unidades de Ictus reducen un 30% la muerte o dependencia por esta enfermedad. Estos servicios especializados cuentan con un método de trabajo protocolizado y con todos los medios necesarios para atender un ictus. Cataluña y Madrid son las comunidades autónomas con mayor número de Unidades de Ictus. Los expertos advierten de que serían necesarias entre 80 y 90 unidades de ictus para atender adecuadamente a todos los pacientes que precisan una atención de estas características en España». El Hospital de León es uno de los centros, con los de Valladolid, Burgos y Salamanca, donde las Cortes de Castilla y León aprobaron en febrero de 2003 la creación de una unidad de ictus. Aún no se ha logrado. No obstante, es el único hospital de Castilla y León que cuenta con un neurólogo de guardia en el servicio de urgencias. La atención por un especialista dentro de los servicios de urgencias es otro de los factores que aumenta las posibilidades de que el paciente se valga por sí mismo después del alta. Actualmente, el Hospital de León aplica un tratamiento (fibrinolisis) que está en fase de validación dentro de la Unión Europea. Esta terapia sólo es efectiva si aplica en las tres primeras horas. El ictus puede ser isquémico o hemorrágico. El isquémico, que supone el 85% de los casos, se produce por una obstrucción del flujo sanguíneo que puede ocasionar la lesión o la muerte de las neuronas. El hemorrágico (el 15% restante) se produce por la rotura de un vaso cerebral.