Los servicios de proximidad, incluido el trabajo doméstico, dan el 68,5% del empleo inmigrante
El 40% de las inmigrantes que trabajan en casas ganan menos de 300 euros
Un estudio de Cruz Roja confirma que una tercera parte de las mujeres envía dinero a su país
Una encuesta realizada por Cruz Roja en Castilla y León desvela que el 40% de las mujeres inmigrantes que viven en León y trabajan en los llamados servicios de proximidad, principalmente empleo doméstico, ganan mensualmente menos de 300 euros, mientras que el 60% restante obtendría unos ingresos de entre 491 y más de mil euros. Los servicios de proximidad, en los que se engloba el empleo doméstico, dan trabajo al 68,5% de las inmigrantes, según este estudio, que también pone de manifiesto que más del 63% de las mujeres que trabajan más de cinco días a la semana perciben menos de 300 euros al mes y que una de cada tres entrevistadas trabaja menos de 21 horas a la semana aunque sea todos los días. El 50% trabajan más de 33 horas y un 25% trabajan más de 40 horas semanales pero perciben menos de 500 euros al mes. Según el estudio La mujer inmigrante en Castilla y León como empleada en los servicios de proximidad , León es la provincia donde más proporción de mujeres inmigrantes, un 20%, tienen ingresos mensuales por encima de los mil euros. Sólo otras dos provincias, Salamanca y Valladolid, tienen empleadas extranjeras que perciben salarios por encima del umbral de los mil euros. Una de las conclusiones del informe es que «existen algunas situaciones de abuso o explotación en algunas de estas mujeres ya que con jornadas semanales de más de 20 horas hay casi un 10% que ganan menos de 300 euros mensuales». El estudio ha detectado que entre las que ganan más de 1.000 euros hay muchas sudamericanas y de países europeos no comunitarios. En cuanto al estado civil, solteras, divorciadas, separadas y las que tienen a sus maridos residiendo en el país de origen son las que perciben salarios de más de mil euros. Los ingresos más bajos se dan en las provincias de Ávila y Zamora, donde más del 50% de las mujeres que trabajan en los servicios de proximidad percibe menos de 300 euros mensuales. Una tercera parte de las inmigrantes envía dinero a su país de origen, según el estudio. Sin embargo, sólo el 28,6% de las inmigrantes encuestadas tiene cobertura sanitaria por cotizaciones propias a la Seguridad Social. Otro 10,7% está atendida como familiar; el 32% carece de cualquier seguro y el 28,6% está acogida a la sanidad a través de la beneficencia. La procedencia de las mujeres inmigrantes no caracteriza a una u otra modalidad de cobertura sanitaria, con excepción de asiáticas y de africanas no magrebíes en los que, según Cruz Roja, «los porcentajes de mujeres que están en situaciones de beneficencia o que se encuentran pagando seguros privados son muy altas». Ávila, León y Zamora son las provincias donde el porcentaje de mujeres inmigrantes con cobertura de la Seguridad Social mediante cotización es más bajo. El estudio, dirigido por el profesor de la Universidad de Valladolid José Carlos Fernández Sanchidrián, muestra que el 40,7% de las inmigrantes no han recibido ninguna formación desde su llegada a Esàá, mientras que el 54,5% restante ha accedido a una gama variada de ámbitos, desde clases de español hasta cursos de primeros auxilios, cultura general o preparación para la obtención del carné de conducir. La mayor parte, el 75%, llegan sin contrato de trabajo, pero «muestran una gran inquietud laboral, pues sus aspiraciones son las de conseguir trabajo o promocionarse laboralmente y mejorar su situación», reconoce el estudio.