Dilapida todos sus ahorros tras diagnosticársele un cáncer que alfinal resultófalso
Un británico de 62 años que se gastó todos sus ahorros tras diagnosticársele un cáncer que luego se demostró que no sufría ha demandado al Servicio Nacional de Salud. Cuando se le diagnosticó la fatal enfermedad, John Brandrick decidió no seguir trabajando, dejó de pagar la hipoteca y se dedicó a la buena vida con su compañera, gastándose una fortuna en restaurantes y hoteles, informó ayer el diario The Times . Un año después, los síntomas comenzaron a remitir, y el hospital llegó al a conclusión de que Brandrick no padecía realmente un cáncer de cáncer terminal sino una simple pancreatitis, perfectamente curable.