Los especialistas quieren crear espacios multidisciplinares para combatir el sufrimiento | Crónica | La historia |
El 60% de los dolores crónicos no están causados por enfermedades físicas Aumenta la demanda La Caixa edita una guía para orientar a los inmigrantes
La Unidad del Dolor del Hospital de León atiende a 2.000 pacientes con patologías benignas
El 80% de las personas padecen dolor crónico alguna vez en la vida. «Cuando un paciente dice que le duele algo es porque le duele de verdad», dicen los tres anestesistas que se encargan de la Unidad del Dolor del Hospital de León: Antonio Pelegrin, Maite Fernández y Emilio Bronte. Esta unidad atiende actualmente a 2.000 pacientes que padecen dolor crónico e irreversible causado principalmente por patologías benignas, como fibromialgia, artritis, artrosis, osteoporosis, intervenciones fallidas de columna, etc. El perfil medio del paciente de esta unidad es el de una mujer de entre 40 y 60 años. Sólo un pequeño porcentaje de las personas que padecen dolor crónico llega a la unidad hospitalaria, «bien porque el médico de cabecera no lo considera necesario o porque el paciente no vive ese dolor como un sufrimiento», dicen los anestesistas encargados de esta unidad. Sin embargo, las cifras no dejan lugar a la indiferencia. Según el doctor Bronte, el 60% de los dolores crónicos que padecen las personas no están provocados por una dolencia física, sino que son ocasionados por un malestar vital. «Lo que buscamos en la unidad del dolor es el confor del paciente, que el enfermo alcance una calidad de vida aceptable. No hacemos nada con quitarle el dolor a un paciente si lo tenemos dormido todo el día», dice el doctor Bronte que asegura que el dolor es «una vivencia emocional, no es sólo la sensación sino la emoción del dolor y esa emoción es el resultado de las realidades y la vida del paciente». Malestar vital Calmar el malestar vital que provoca el dolor es uno de los objetivos de estas unidades, muy escasas todavía en los hospitales públicos españoles. El Hospital de León es pionero en el tratamiento del dolor. El doctor Antonio Pelegrin, uno de los primeros en el tratamiento del dolor en España, está al frente de una unidad a la que le gustaría incorporar otros profesionales que ofrezcan una atención integral del paciente, «queremos incorporar médicos psicólogos y neurocirujanos, pero unidades que tengan estos servicios hay cuatro en España porque la administración no nos considera al no tener nuestro servicio una traducción fácil en dinero. No les gusta que los especialistas salgan de los quirófanos». Pelegrin busca una unidad multidisciplinar, «pero en España no llegan a cuatro las que hay con todas estas características». Los pacientes con dolor representan una minoría con el resto de enfermos que se atienden en el Hospital, «pero generan un gasto sanitario importante, tanto en demanda de servicios sanitarios, gastos farmacológicos y bajas laborales, sin embargo, las listas de espera clínica son más fáciles de cuantificar», dicen los especialistas que se encargan de esta unidad. «La administración nunca ha sido consciente del tratamiento del dolor». Los pacientes oncológicos han dejado de ser el objetivo principal de estas unidades para ser tratados por los especialistas en tumores en cuidados paliativos. Son los dolores crónicos los que ocupan casi la totalidad de las consultas. Los tratamientos ayudan a aliviar el dolor de las totalidad de los pacientes, «pero no podemos crear falsar expectativas, lo que procuramos es hacerle al paciente la vida más soportable». Desde el año 1966 se trata el dolor pioneramente por el doctor Madrid Arias, aunque no es hasta 1973 cuando se inaugura la Clínica del Dolor del Hospital Doce de Octubre de Madrid, a la que seguirán otras como la de Cataluña y Valle de Hebrón, de Barcelona. A partir de ese año y hasta los primeros años de la década de los ochenta se incorporan médicos jóvenes que inician su formación en el tratamiento del dolor crónico, entre los que está el doctor Antonio Pelegrin, el responsable de la Unidad del Dolor del Hospital de León. En la década de los ochenta se produce una verdadera eclosión de nuevas clínicas del dolor, llevadas a cabo en su mayor parte por jóvenes anestesiólogos. En el año 1983 se crea la sección de Anestesia Loco-Regional y Terapia del Dolor. La tercera reunión de este colectivo se reunió en León en 1988. Dos años más tarde se creó la Sociedad Española del Dolor. En el año 2002 había en España 93 unidades del dolor y sólo once tienen médicos de otros servicios integrados al 100% dentro de ellas. La demanda está ahí. En un año, las unidades existentes han tratado a 200.000 personas, de acuerdo con los datos de la Sociedad Española del Dolor (SED). Depresión y dolor Un estudio de la sociedad internacional de médicos dedicados al dolor afirman que sólo el 2% de quienes lo necesitan reciben tratamiento. Unas 38.000 consultas -el 19%- fueron solicitadas por pacientes que acudían a estas unidades por primera vez. El dolor oncológico, que fue el origen de todas estas unidades, representan sólo el 8% de las consultas que actualmente atienden estas unidades. El 100% de los pacientes que reciben tratamiento mejoran, aunque el dolor no se quita del todo. «Nosotros imponemos una mezcla de tratamientos antiinflamatorios, neuropáticos, de sedación y queremos asumir la colaboración de médicos psicólogos que sean capaces de tratar la faceta psicológica de los enfermos, porque el paciente con dolor es un enfermo deprimido», dicen los responsables de León, tres anestesistas que llevan el peso del servicio en el Hospital. Unidad del dolor Casos Primeras consultas externas 260 Interconsultas 78 Revisiones 1.076 Enfermos ingresados 7 Estancias totales 727 Dolor postoperatorio 1.067 Epidurales (2007) 1.612 Los extranjeros representan ya el 3,87% de la población leonesa, lo que significa que en la provincia viven 19.265 inmigrantes. Estos son los datos con los datos con los que trabaja la obra social de La Caixa y que, entre otras cosas, ha motivado la publicación de una guía que pone al alcance de los inmigrantes los recursos básicos de información para que conozcan los canales y mecanismos para hacer uso de los servicios de la sociedad y puedan alcanzar plena autonomía. La guía ¿Cómo es este país?, información útil para las personas inmigradas y los nuevos residentes , proporciona la información práctica sobre el marco legal, vida cotidiana y trabajo. Para que sea una herramienta útil se publica en siete idiomas: castellano, francés, árabe, chino, ruso, rumano e inglés. Mediadores La obra social de La Caixa dispone de una red de mediadores -uno de ellos en León en la asociación Accem que ha beneficiado a 3.125 personas- que tienen como objetivo facilitar la inclusión social de las personas recién llegadas. Los 114 profesionales realizan su trabajo en 17 comunidades autónomas con el objeto de crear puentes entre culturas y potenciar el diálogo. Se calcula que hay casi cuatro millones de personas extranjeras empadronadas en España, lo que representa un 8,8% del total de la población, pero, según los responsables de La Caixa, se prevé que esta cifra aumente hasta más de 6 millones en el año 2010, lo que representaría el 14,3% de la población. En Castilla y León el porcentaje de extranjeros es del 4,74% ya que de los 2.528.417 de habitantes, 119.781 son inmigrantes, en su mayoría procedentes de otras ciudades de Europa, seguidos por los más de 41.000 latinoamericanos.